Descubre las diferencias entre los pisos vinílicos en rollo, baldosa y listón para aprovechar lo que cada tipo puede ofrecer para tu proyecto
El piso vinílico se adapta fácilmente a diferentes perfiles de proyecto gracias a la variedad de formatos que este revestimiento ofrece, aportando beneficios como agilidad en la instalación, practicidad en el mantenimiento y confort térmico/acústico.
Aunque todas las opciones parten de una base común – están hechos de PVC mezclado con otros ingredientes como cargas minerales, plastificantes, pigmentos y aditivos –, no todos los pisos vinílicos son iguales.
Para aprovechar lo que cada tipo puede ofrecer, es importante conocer primero cuál es la diferencia entre los formatos de pisos vinílicos: baldosa, listón y rollo. Líder mundial en este tipo de revestimiento, Tarkett explica en este artículo del Blog todo lo que necesitas saber. ¡Descúbrelo!
¿Cuáles son los formatos de piso vinílico?
Los pisos vinílicos se encuentran en tres formatos:
- Listón
- Baldosa
- Rollo
El listón es el formato más tradicional de piso vinílico. Cubre prácticamente toda la oferta de patrones amaderados, cuyo propósito es precisamente reproducir la estética de las largas tablas rectangulares de madera natural.
La baldosa también es popular entre los vinílicos, especialmente cuando la idea es diversificar el patrón para un aspecto más moderno y colorido. También es la aplicación ideal para piso elevado, que requiere baldosas autoportantes.
Diferente de la baldosa y el listón, que son modulares, el piso vinílico en rollo ofrece una con aspecto visualmente más uniforme. Además, no tiene juntas visibles, ya que se sellan durante la instalación.
Considerando el escenario de una reforma, por ejemplo, todos los formatos mencionados pueden instalarse sobre pisos existentes, como los de cerámica, siempre que el contrapiso esté en las condiciones necesarias.
¿Cuáles son los consejos para usar cada uno de estos formatos?
El listón es la elección segura para cualquier proyecto, especialmente en aquellos donde el aspecto acogedor de la madera es destacado en la paleta de colores, texturas y materiales.
Si la idea es arriesgar un poco más en la disposición de las piezas, es posible crear patrones divertidos, como el clásico Chevron o espiga. Las posibilidades de aplicación son tantas que no se limitan al piso: ¡pueden subir por las paredes y llegar al techo!
En Tarkett, por ejemplo, un listón convencional pegada mide 184 x 950 mm, pero también puedes encontrarla en diferentes tamaños en la versión click y en gran formato (XL) de 228 x 1830 mm.
La modularidad de la baldosa hace que sea un formato igualmente creativo como el listón, pero con el beneficio de tener aún más opciones de diseño, ya que permite combinar formas geométricas, patrones y colores en las versiones pegadas y clicadas.
Tarkett tiene en su portafolio modelos que van desde los clásicos cuadrados y rectangulares en varios tamaños hasta los más inusuales, como el triangular y el trapezoidal. También es posible encontrar opciones en versión XL de 950 x 950 mm.
La aplicación del piso vinílico en rollo es recomendada para ambientes que requieren mayor atención en cuanto a limpieza, confort y resistencia, ya que acumulan menos suciedad debido al sellado de las juntas, además de proporcionar excelente acústica y resistencia al tráfico.
Generalmente distribuidas en rollos, los rollos vinílicos de Tarkett son muy utilizados en dormitorios y espacios infantiles, ya que ofrecen confort térmico, mejoran la calidad del aire interior y son antialérgicas.
Ahora que ya conoces las principales diferencias de cada formato de vinílico, ¡solo te queda decidir cuál se adapta mejor a tu proyecto! Puedes conocer todas las líneas disponibles en Tarkett haciendo clic aquí.
