Cada vez más, tener una casa o apartamento con ambientes integrados se consolida entre los principales deseos de quien conquista el sueño de la vivienda propia.
A pesar de que sea aplicable en la mayor parte de los ambientes, es la unión entre la sala de estar y/o la sala de cenar con la cocina lo que hace que los ojos de las personas brillen.
Desafortunadamente, es un sueño que no está al alcance de todos, pues no siempre será posible derribar todas las paredes en una reforma y así eliminar las barreras físicas y visuales entre los ambientes.
Antes de poner las manos en la masa, es importante que los profesionales verifiquen la presencia de las llamadas paredes estructurales, que no pueden ser derribadas – si lo fueren pueden poner en riesgo toda la estructura, una grave amenaza principalmente en edificios.
Si es posible, lo ideal es buscar emprendimientos que ya contemplen esta posibilidad de integrar las salas con la cocina desde la obra, entregando la casa o apartamento con ambientes ya unidos o cercadas de algunas paredes que pueden ser retiradas sin problemas.
Integración física y visual
De nada sirve de nada derribar todas las barreras físicas que separaban los espacios si, visualmente, aún existen elementos que denotan claramente las divisiones que allí existían.
Los acabados de piso y pared son grandes aliados de cualquier ambiente que deseamos integrar – es necesario armonizar las transiciones entre cada habitación para que el trayecto se torne lo más suave e imperceptible posible, sin desistir de la comodidad y de la personalidad que cada uno debe tener.
El piso vinílico es la mejor opción para ambientes internos, pues entrega más beneficios que otros tipos de revestimiento, como el piso laminado y los llamados ‘pisos fríos’. Es rápido de instalar, fácil de mantener y cómodo en términos térmicos y acústicos.
Con tantas ventajas, integrar los ambientes en una reforma o en una casa nueva es mucho más fácil. ¡En el post de hoy presentaremos a continuación tres consejos para integrar la decoración de las salas con la cocina utilizando el vinílico! Ven con nosotros:
1. Utiliza el mismo estándar y color
La solución más simple y eficiente de integrar ambientes internos es utilizar el mismo estándar y color de piso vinílico en todos los ambientes, sobre todo en aquellos que ya realizaste la retirada de las barreras físicas y visuales que dijimos anteriormente.
Esto es una quiebra de paradigma, pues a lo largo de los años, nos acostumbramos a tener un tipo o color de piso diferente en cada habitación, lo que deja de tener sentido a partir del momento en que deseamos tenerlos todos juntos.
Además de esto, el vinílico puede ser utilizado en prácticamente todos los ambientes internos, con excepción a los baños con ducha. Tampoco es posible instalarlo en áreas externas.
2. Aproveche la perspectiva
Este es un buen consejo para quien tiene ambientes integrados que son largos, pero estrechos, lo que acaba dando la impresión de opresión incluso cuando se puede circular o visualizar todos los espacios.
En este escenario, el diseño del piso hace toda la diferencia y aquí las tablas vinílicas se destacan. El consejo es posicionar las tablas en el sentido de la pared más al fondo del ambiente, lo que acaba conduciendo la mirada en perspectiva hasta el final.
Además de elegante, esta composición ayuda a consolidar la impresión de unión entre los espacios. También puedes subir con el vinílico por la pared, pudiendo llegar hasta el techo.
3 – Apuesta en diseños creativos
Una apuesta atemporal es el diseño conocido popularmente como espina de pescado, que se puede hacer de diversas maneras, desde las más clásicas con tablas en estándares de madera, hasta las más coloridas y contemporáneas.
Otra manera de abusar de la creatividad es utilizar estándares, colores y texturas diferentes, formando dibujos variados que se extenderán por todos los espacios.
Tener un ambiente integrado es un sueño, ¿no es verdad? Con estos consejos es más fácil hacerlo real. Si aún tienes dudas, estamos esperándote en los comentarios.